10 minutos de yoga facial para una piel firme y relajada
8 abril 2022 Estimated time: ~2 min.
Tenemos unos 50 músculos en la cara, que también necesitan relajación y... ejercicio, al igual que las piernas o los brazos.
Los momentos estresantes dejan marcas en nuestro rostro porque la piel es más difícil de oxigenar y los músculos de la cara están tensos. Con el tiempo, esto conduce a la aparición de arrugas, aspecto apagado, falta de luminosidad y firmeza.
Más recientemente ha surgido una nueva forma de yoga, una técnica de rejuvenecimiento de la piel llamada yoga facial, que promueve una serie de ejercicios que descongestionan los músculos faciales, dándote un aspecto más fresco y juvenil.
Los ejercicios tienen la función de estimular la producción de colágeno y elastina en la dermis, y para ayudar aún más a la piel, puedes utilizar un sérum o un aceite facial.
Un programa de ejercicio diario de diez minutos puede acabar con dos años de envejecimiento, en solo unas pocas semanas, especialmente para mujeres de mediana edad.
Para las mejillas:
Inhala profundamente y, con la boca cerrada, sopla el aire al interior de tus mejillas, de forma que la piel de la parte exterior se estire lo máximo posible. Repite el ejercicio cinco veces. Continúa tirando de sus mejillas hacia adentro, como si bebieras con una paja. Mantén la posición durante unos segundos y luego suéltala. El ejercicio estimula los músculos de la parte inferior de la mejilla.
Para reducir las bolsas debajo de los ojos y las ojeras:
Con la ayuda de los dedos índice y medio de la misma mano, lo suficientemente separados como para formar una V, presiona suavemente el extremo interior y el extremo exterior de cada ceja. Con esta posición mira al techo y levanta los párpados inferiores. Entonces relájate. Repite este ejercicio seis veces.
Para suavizar la piel:
Elige una posición cómoda y fróttate las palmas de las manos hasta que se calienten. Con movimientos suaves muy ligeros, masajea el rostro con movimientos ascendentes. Repite 2-3 veces. Finalmente, cúbrete los ojos con las palmas de las manos, presionando los párpados ligeramente sobre los globos oculares.
